Esperanza
Ella me hablaba de sus días de esperanza en la vida, y de que a veces, menos que más, por estos días, solía albergarla aún, como si sintiera que podría sentirse sorprendida gratamente, es más, lo deseaba. Pero luego, recordaba de tantas oportunidades en las cuales se ilusionó, sea por un trabajo, o por una posibilidad de ganar mejor con lo que hacía, o con el reconocimiento de algunas personas importantes, o con que quien tenía al lado se despertara y se diera cuenta de lo equivocado que estaba, que bajara su soberbia y dejara de creer que solo él tiene la verdad y se diera cuenta de que quien tiene al lado está sufriendo.... pero nada de eso ocurrió y bueno, tantas veces se había dado de bruces contra el pavimento que ya sentía dolor con solo pensar en entusiasmarse y luego caer nuevamente. Sin embargo, había en su expresión algo que me decía que venía a mí porque creía que podía ayudarla. De hecho en principio lo hablamos, dado que de otro modo, yo no hubiera aceptado tamaña tarea